
La madre de Joselin Mamani, la niña de 10 años asesinada en 2019 en Longchamps, se sentará en el banquillo de los acusados este lunes en el Tribunal Oral en lo Criminal N°4 de Lomas de Zamora. Zaida Mamani es la única acusada por el crimen de su hija, aunque detrás de esa acusación se esconden infidelidades, frases bíblicas en las paredes y una posible venganza.
El 7 de enero de 2019, Zaida salió de su casa para ir al banco y le preguntó a su hija si la quería acompañar. La niña respondió que no, ya que hacía calor. Zaida cerró la puerta con llave y le dijo que no abriera a nadie. Cuando regresó, se encontró con la puerta abierta y una escena aterradora: su hija estaba muerta sobre un charco de sangre, después de haber sufrido 74 puñaladas, 17 de ellas en la cara.
Las primeras pericias determinaron que la puerta no había sido forzada, lo que significaba que había entrado alguien que tenía las llaves de la casa. Los sospechosos fueron Zaida, Carlos Correa, expareja de Zaida y padre de un hijo en común, y Rubén Correa, hijo de Carlos y actual pareja de Zaida.
La historia entre los sospechosos comenzó siete años antes del crimen de Joselin. Carlos y Zaida fueron pareja durante seis años y planeaban construir una casa juntos. Sin embargo, Zaida comenzó una relación paralela con Rubén, hijo de Carlos, quien también trabajaba con ellos en la construcción. Cuando Carlos se enteró de la infidelidad, decidió separarse y continuar viviendo en la misma casa por cuestiones económicas. Sin embargo, las agresiones y la tensión aumentaron, y Zaida finalmente decidió irse con Rubén, quien era 30 años mayor que ella.
Después de la separación, Carlos comenzó a escribir frases bíblicas y religiosas en las paredes de la casa. Joselin respondía a las pintadas de su expadrastro con mensajes como no es cierto. La relación entre Rubén y Zaida continuó y tuvieron dos hijos juntos, pero Carlos seguía teniendo las llaves de la casa y continuaba entrando y escribiendo mensajes en las paredes.
Zaida fue acusada de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por alevosía en perjuicio de su hija. El juicio comenzará este lunes y un jurado popular deberá declararla inocente o culpable. El abogado de Zaida, Ernesto Flores, se mostró confiado en que la fiscalía tendrá dificultades para probar su culpabilidad, ya que no hay pruebas materiales directas contra ella. Además, señaló que la escena del crimen estuvo contaminada y que existe un ADN que no corresponde con la víctima o con Zaida.
Desde la defensa de Zaida aseguran que uno de los principales problemas de la investigación fue que la escena del crimen estuvo muy contaminada y que se perdieron muchas pruebas. Además, la pericia psicológica demostró que la imputada no tiene un perfil para realizar este tipo de crímenes y el ADN dio negativo. El abogado Flores no se mostró en contra del juicio por jurados y aseguró que van a demostrar que no hay una prueba que la incrimine directamente.
En caso de que Mamani sea declarada inocente, su defensa continuará con la denuncia contra otros tres sospechosos: Carlos Correa, expareja de Zaida; y Belen Beloso y Jonathan Meriles, una pareja vecina que ellos creen que podría haber asesinado a la nena de 10 años.,