
El futbolista francés Allan Saint-Maximin, de 28 años, ha generado controversia con sus recientes comentarios sobre su paso como préstamo por el Fenerbahçe. Saint-Maximin, quien anteriormente deslumbró en el Newcastle, tuvo una experiencia difícil en Turquía, donde estuvo plagado de lesiones y enfermedades, lo que resultó en solo 4 goles en 31 partidos.
Durante una entrevista con el youtuber francés Zack Nani, Saint-Maximin hizo graves acusaciones contra el club, declarando que intentaron drogarlo y amenazarlo. Intentaron darme drogas y me amenazaron con inyectarme cosas sin sentido, dijo. Eso no tiene nada que ver con el fútbol y me afectó mucho, no se puede jugar bien en esas circunstancias.
En una declaración al medio X, Saint-Maximin sumó más detalles a sus acusaciones, afirmando que los médicos del club le administraron una droga considerada dopante durante un periodo de enfermedad. No sé por qué lo hicieron, pero la gente del club estaba dispuesta a todo, agregó.
Sin embargo, el Fenerbahçe ha negado enérgicamente las acusaciones de Saint-Maximin y ha anunciado su intención de emprender acciones legales contra el jugador. Hemos seguido con asombro las declaraciones de Allan Saint-Maximin, quien vistió nuestra camiseta en la temporada 2024-25, se lee en un comunicado del club. El hecho de que un deportista haya distorsionado los hechos sobre el tratamiento al que se ha sometido tras un problema de salud que ha experimentado es un intento de dañar la reputación de nuestro club.
Es importante tener en cuenta que las acusaciones de Saint-Maximin son muy graves y, de ser ciertas, constituirían una clara violación de las normas éticas y legales en el mundo del fútbol. Sin embargo, también es crucial recordar que todas las partes involucradas tienen derecho a una investigación justa y a ser escuchadas antes de llegar a conclusiones definitivas. El tiempo dirá si se puede afrontar esta noticia con más claridad y certeza.,