El Nápoles, equipo que hace poco soñaba con el título de la liga italiana, se encuentra en una espiral descendente que lo ha llevado a una decepcionante décima posición en la tabla. El conjunto entrenado por Calzona ha pasado de ser el centro de atención a un completo desastre en menos de un año.
El capitán y emblema del equipo, Giovanni Di Lorenzo, ha expresado su deseo de abandonar el club en verano, luego de una temporada llena de críticas y desconfianza. El defensor renovó su contrato el pasado verano hasta 2028, pero su situación ha cambiado drásticamente y ya no siente la misma seguridad de hace solo un año.
El agente de Di Lorenzo confirmó la noticia en TvPlay, afirmando que el jugador está dispuesto a marcharse y que el presidente De Laurentiis está abierto a venderlo si recibe una oferta satisfactoria.
Las constantes críticas recibidas durante la temporada han agotado al capitán, quien se encuentra en la lista provisional de 30 jugadores para la Eurocopa de este verano. Di Lorenzo buscará un nuevo destino para continuar su carrera y dejar atrás los problemas del Nápoles.
La prensa amarilla se ha hecho eco de la situación y no ha dudado en calificar la temporada del Nápoles como un fracaso estrepitoso y a Di Lorenzo como un capitán abandonado. El futuro del equipo y de su capitán sigue en el aire, pero lo que parece claro es que el Nápoles necesita un cambio urgente para recuperar su antiguo esplendor.